Somos unos papás que en el mes de diciembre tuvimos a nuestra pequeña Laia, de 9 meses, ingresada durante cuatro eternos días en el hospital San Pedro. Como os podéis imaginar, fueron unos días muy duros . Allí descubrimos el “Hospital Imaginario”, una asociación formada por varios voluntarios cuyo objetivo es mejorar el estado emocional de los niños ingresados en el hospital. Han pasado varias semanas desde entonces pero no queremos dejar de reconocer la gran labor que hacen. Es digna de admirar porque, hasta en esos momentos tan duros y difíciles, logran sacar una sonrisa a nuestros enanos y sobre todo a los mayores que les acompañamos. Consiguen que desconectemos y disfrutemos de sus juegos y animaciones con nuestros peques ¡hasta en una habitación de hospital! Por eso, escribo este agradecimiento porque quiero animarles a que continúen con esta gran idea y darles las gracias por cuidarnos de esa forma tan peculiar y especial. ¡Os deseamos que en el 2013 sigáis sacando miles de sonrisas! Un gran abrazo a todos los que formáis parte de Hospital Imaginario. Laia, papi y mami
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